En la segunda clase teórica del segundo cuatrimestre, nuestra profesora expuso una serie de conocimientos sobre las escuelas aceleradas y las escuelas cooperativas.
Para empezar, es necesario conocer qué es una escuela acelerada. Ésta se encuentra en zonas marginales donde existen altos niveles de abandono escolar, y por tanto la comunidad educativa tiene que tomar medidas. Los profesores bajan el nivel académico para ayudar a los alumnos a avanzar, y de esta forma intentan hacer disminuir el fracaso escolar. Con respecto a este hecho, lo considero muy inteligente por parte de los maestros, el intentar que sus alumnos no abandonen su formación, aunque ellos tengan que cambiar sus metodologías para intentar llegar a los mismos objetivos iniciales pero de distinta manera. Expresamente, la forma de enseñar de estos docentes es intensiva, porque intentan estimular a los niños al máximo, por el hecho de que en sus casas no van a disponer de una estimulación dirigida al aprendizaje, que les permita desarrollarse tanto moral como intelectualmente.
Para estimular a los niños lo más plenamente posible, realizan salidas a parques, entornos ricos en naturaleza y fauna, etc., para que no solo se lleve a cabo este proceso dentro del aula. De esta manera todo lo que no suelen aprender estos niños en casa desafortunadamente, se intenta que lo aprendan de acuerdo a las directrices de los profesores.
Una de las características de este tipo de escuela, que muchas ordinarias intentan conseguir, es que todo el mundo que participa tiene que estar implicado en todo aquello que se realice, actividades, voluntariado, etc. Ésta es una de las principales condiciones de la escuela acelerada. En torno a este requisito, considero que es necesaria una predisposición de ayuda por parte de la sociedad, de acuerdo a las circunstancias en las que se encuentra el alumnado de estas escuelas.
En segundo lugar, se va a explicar y a realizar una reflexión sobre otro tipo de escuela; la escuela cooperativa. Ésta está formada por una empresa cooperativa, formada por un conjunto de socios y propietarios del propio colegio, puesto que han contribuido en una parte monetaria a la creación o al funcionamiento de éste. Las decisiones se toman en asamblea, y deben estar al corriente de todas las novedades de la escuela.
En mi opinión, el grupo de personas responsables del funcionamiento de la escuela cooperativa, debe disponer de profesionales de la educación, no solamente empresarios, puesto que el principal objetivo de un colegio debe ser contribuir al desarrollo intelectual de los alumnos, y ellos son los que conocen las medidas necesarias para lograr dicho fin.
Por último, existe un gran número de escuelas de este tipo, unas 110 aproximadamente, solo en la Comunidad Valenciana. Algunas son: la Devesa, Aire lliure cooperativa, escuela Aire libre, etc.
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